Es aquel divorcio que no requiere de un tiempo de separación. Este divorcio puede demandarse de inmediato, sin transcurso de tiempo alguno, si es que se configura la causal. La casual de este tipo de divorcio es la violación grave por parte del otro cónyuge de los deberes y obligaciones que les impone el matrimonio, o, de los deberes y obligaciones para con los hijos, que torne intolerable la vida en común. Y se incluye aquí, la infidelidad, el abandono, el alcoholismo, la drogadicción, etc.

REQUISITOS:

1.- No es necesario transcurso de tiempo alguno de separación.

2.- Basta para su tramitación una falta imputable de uno de los cónyuges y que esto haya tornado intolerable la vida en común.

3.- Se justifica como causal, entre otros casos, los que siguen: El maltrato al cónyuge o a los hijos; el abandono continuo o reiterado del hogar común; la infracción al deber de fidelidad y socorro; ciertas conductas delictivas; la homosexualidad; determinadas adicciones y; el intento de prostituir al cónyuge o hijos, son conductas tipificadas en este tipo.